El arbitraje es un mecanismo para la resolución de conflictos y pleitos judiciales que puedan darse entre personas. En la industria musical, este mecanismo le permite a los artistas, productores, sellos discográficos y cualquier otra parte solucionar sus disputas de una forma rápida, eficaz y sin tener que recurrir a los procedimientos judiciales. Por esta razón, en los últimos años el arbitraje se ha popularizado en la industria musical y cada vez es más frecuente que a la hora de celebrar contratos musicales, se incluyan cláusulas arbitrales con el fin de fijar este proceso como la forma que, por defecto, se usará en lo respectivo a la solución de cualquier conflicto que pueda derivarse de estos contratos. 

De esta forma, resulta importante conocer cuales son los principales aspectos del arbitraje, sus características y las ventajas que tiene su aplicación en la industria musical. 

Protege tus regalías y asegura el éxito financiero de tu música. Agenda una asesoría jurídica para revisar tus contratos y recibe el respaldo que necesitas. ¡Contáctanos ahora!

¿Cómo funciona el arbitraje en Colombia?

En Colombia, las reglas acerca del arbitraje se encuentran reguladas en la Ley 1563 de 2012. Por un lado, en el artículo 3 de dicha ley establece que para poder llevar un conflicto ante el arbitraje es necesario que exista un pacto arbitral. El pacto arbitral es el acuerdo de voluntades por medio del cual ambas partes aceptan que su conflicto sea resuelto por un tribunal de arbitraje y se someten a la decisión dictada. Dicho pacto tiene dos modalidades:

• Como cláusula compromisoria: esta cláusula puede ser insertada en cualquier contrato que sea celebrado entre las partes y contempla que, en aquel caso en el que lleguen a suceder conflictos de intereses en torno al contrato, estos se resolverán mediante un tribunal arbitral. De esta forma, desde un principio las partes están sometiendo a que en el futuro sus controversias sean resueltas por un árbitro.
• Como compromiso: en este caso, debido a que no se ha pactado con anterioridad una cláusula compromisoria, las partes de forma voluntaria y expresa deciden llevar su conflicto ante un tribunal arbitral para que éste resuelva la controversia.

La existencia del pacto arbitral, ya sea a través de una cláusula compromisoria o de un pacto arbitral es fundamental para que las partes puedan acceder al arbitraje como medio de resolución del conflicto. Sin embargo, para que dicho pacto sea válido se deben de cumplir, además con algunos requisitos: que conste de forma expresa el acuerdo de voluntades, que se encuentre en un documento escrito y que en este se encuentre contenido el nombre de las partes y el conflicto sometido al arbitraje.

Lo más importante es que el pacto se haya originado de común acuerdo entre las partes, pues la jurisdicción arbitraria es completamente voluntaria. Por otro lado, de acuerdo con el artículo 6 de la Ley 1563 de 2012 el documento en el cual consta el pacto arbitral debe contener los nombres de las partes, la indicación de los conflictos que se someten al arbitraje y la modalidad del laudo (o fallo) que las partes deseen obtener al final del proceso: en derecho, en conciencia o equidad o laudo técnico.. Hay que tener en cuenta que en aquel caso en el que las partes no especifiquen el tipo de laudo, los árbitros fallaran en derecho.

Una vez las partes tengan el pacto arbitral, en virtud del artículo 12 de la Ley 1563 del 2012 podrá acudir ante el centro de arbitraje acordado y presentar su demanda, la cual debe de reunir todos los requisitos establecidos en el Código General del Proceso, junto con el documento en el que consta el pacto arbitral. Una vez hecho esto, el centro de arbitraje recibirá la demanda, la estudiará y procederá a integrar el tribunal arbitral encargado de resolver la disputa. 

Quizás  te pueda interesar: ¿Cómo exigir el pago de las regalías o royalties por el uso o explotación de mi música?

¿Qué beneficios tiene el arbitraje en la Industria Musical?

En comparación con la jurisdicción civil y los tribunales ordinarios, el arbitraje y los tribunales arbitrales conllevan una serie de ventajas en torno a la resolución de los conflictos derivados del pago de regalías, la protección de los derechos de autor, los derechos de artistas e intérpretes y cualquier otra disputa relacionada con la industria musical y la propiedad intelectual. En particular, el arbitraje se caracteriza por:

1. 1. La flexibilidad: debido a que se trata de un procedimiento completamente voluntario, las partes pueden elegir quienes serán sus árbitros, el número de árbitros que desean tener y el tipo de laudo que quieren que sea dictado en el curso del proceso. Esto les da a las partes un mayor control sobre el procedimiento, en comparación con un proceso ordinario civil.
   2. La rapidez: a diferencia de la jurisdicción civil, el arbitraje tiene términos y tiempos relativamente rápidos. De acuerdo con el artículo 10 de la Ley 1563 de 2012, la duración máxima de un proceso arbitral será de 6 meses, contados a partir del momento en el que se haya integrado el tribunal arbitral.
   3. Los costos reducidos: Si bien los honorarios de los árbitros pueden resultar bastante altos en comparación al costo total que implica un proceso ordinario, en las disputas con cuantías altas este costo se ve compensado gracias a las soluciones ágiles que se obtienen con respecto al caso y a las grandes sumas que normalmente se condenan a pagar.
   4. Una proceso más especializado: a diferencia de los procesos ordinarios, en donde la formación de los jueces les da un conocimiento completo, aunque general, de varias de las áreas del derecho, en los procesos arbitrales, los árbitros se escogen de acuerdo a su nivel de especialidad y conocimientos aplicables al caso concreto. En un proceso en el que se están reclamando perjuicios contractuales y extracontractuales, por ejemplo, el árbitro será una persona que no solo cuente con una amplia formación en derecho, sino que también deberá de haberse especializado en temas de responsabilidad civil y daño. 

Quizás te pueda interesar: ¿Qué es el IPA y cómo se aplica al caso de los Rolling Stone?

¿Qué tan efectivo ha sido el arbitraje para resolver las disputas en torno a la industria musical?

En materia de derechos de autor, propiedad intelectual, pago de regalías y otros temas de industria musical el arbitraje ha resultado ser bastante útil. En concreto, el arbitraje ha encontrado su uso en temas como las reclamaciones por infracción a los derechos de autor, las cuales por lo general son iniciadas por algunos artistas y compositores cuando se presentan similitudes entre canciones u obras musicales. 

Por otro lado, también ha sido ampliamente utilizado para resolver las disputas sobre regalías y el reconocimiento de los derechos patrimoniales de las obras musicales, especialmente en los últimos años debido a que, con la llegada de las plataformas de streaming han aumentado el número de conflictos acerca de las diferencias en los cálculos del valor de regalías. Además, el arbitraje también ha sido utilizado como una forma eficiente de interpretar el alcance de algunos de los contratos relativos a la industria musical, pues en muchas ocasiones la redacción o los términos utilizados en estos contratos pueden ser algo confusos, por lo que es necesario que un abogado especialista  realice una interpretación objetiva de los mismos con el fin de aplicarlos apropiadamente.

La utilidad del arbitraje para resolver este tipo de disputas puede comprobarse a través de casos como el de Kesha contra Dr.Luke (Lukasz Gottwald). En el 2014 la artista demandó al productor con el objetivo de romper el contrato que había firmado cuando tenía 18 años, en el cual había suscrito un  un acuerdo exclusivo de grabación de seis álbumes con el productor, quien a cambio recibiría una parte significativa de las ventas de cada álbum. Con este fin, Kesha acusó a Dr.Luke de agresión sexual, acoso sexual, violencia de género, acoso civil, prácticas comerciales injustas e infligir angustia emocional. Después de dos años de largos litigios y encuentros en los tribunales, la demanda fue finalmente retirada por la cantante debido a que durante el tiempo que duró el proceso, algunos aspectos y condiciones con respecto al contrato entre la artista y el productor fueron sometidos a arbitraje con el fin de resolver, al menos, la parte comercial de la demanda presentada. 

Por otra parte,  también se encuentra el caso de Spotify contra Wixen Music Publishing, en donde Wixen demandó a la plataforma debido a que consideraba que esta no tenía las licencias válidas para transmitir las canciones de su catálogo. Además, también se acusó a Spotify de no pagar las regalías correspondientes a artistas como Tom Pretty, Neil Young, The Doors, The Beach Boys, Janis Joplin, Weezer, The Black Keys, entre otros (…) si bien en el 2017 Wixen presentó la demanda ante un tribunal civil, al poco tiempo ambas partes decidieron llevar el conflicto ante un tribunal arbitral con el fin de resolver la disputa de forma ágil y con la mayor confidencialidad posible. De este modo, en 2018 Spotify anunció el fin de la disputa legal mediante la suscripción de un acuerdo económico cuyas condiciones nunca fueron divulgadas al público.

Finalmente, también se encuentra el caso de Warner Music Group contra Spotify acerca de la participación que ambas partes tienen en el mercado musical de la India: En el 2019, Warner Music presentó una demanda con el fin de evitar que Spotify utilizara su catálogo sin un respectivo acuerdo de licencia y alegaron que Spotify estaba infringiendo los derechos de autor al incluir gran parte de sus canciones en la plataforma. Debido a esto, en el 2017 y gracias a un proceso arbitral que duró menos de un año, ambas partes pudieron firmar un acuerdo de licencia global en el cual Warner Music autorizó a Spotify para que distribuyeran de forma masiva la música de los artistas que representaba la disquera, a cambio de una apropiada remuneración y un correcto pago de regalías, cuyos montos y forma de calcularlo fue incluido dentro del acuerdo firmado.

Asesórate con un abogado especialista en Industria Musical

Cuando se llevan a través de procesos civiles y por la jurisdicción ordinaria los conflictos entorno a los derechos de autor y al reconocimiento de las regalías a favor de los artistas pueden convertirse en procesos excesivamente largos y tediosos, especialmente si no se cuenta con el conocimiento y las estrategias legales necesarias para manejar este tipo de procesos. 

En Roa & Sánchez Abogados, entendemos la importancia de llevar procesos ágiles y eficaces que puedan resolver en el menor tiempo posible los conflictos ocasionados en materia de derechos de autor y propiedad intelectual. Contamos con la suficiente experiencia para asesorarte acerca de las vías judiciales y soluciones  que mejor se ajusten a tu caso, ayudándote a decidir si es más conveniente para tus intereses iniciar un proceso arbitral o recurrir ante la jurisdicción ordinaria. 

Nuestra experiencia y conocimiento en temas de derecho comercial y de la industria musical  nos brinda una amplia gama de herramientas y estrategias legales que son de utilidad a la hora de proteger los intereses y derechos de los artistas. Por esta razón, proporcionamos orientación experta en asuntos de derechos de autor, pago de regalías, suscripción de acuerdos de propiedad intelectual y mecanismos de solución de conflictos para estos temas.

Contáctanos y agenda una asesoría jurídica especializada y descubre cómo podemos ayudarte a realizar el cobro de las regalías causadas por la explotación de tus obras musicales.