Si estás pensando en comprar un vehículo nuevo o usado, es fundamental evaluar varios factores antes de tomar la decisión. Entre ellos se destacan la devaluación del vehículo, su vida útil y el kilometraje recorrido.

“Según el Ministerio de Transporte de Colombia, un vehículo comienza a perder valor desde que sale del concesionario, con una devaluación que puede alcanzar entre el 15% y el 30% en el primer año, y hasta un 50% o 60% en los primeros cinco años, dependiendo de factores como el mantenimiento, el kilometraje, el tipo de uso y los daños por accidentes.”

No obstante, muchas personas optan por adquirir un vehículo usado, ya que la vida útil promedio de un automóvil oscila entre 15 y 20 años, lo que representa una alternativa conveniente en términos de durabilidad.

Requisitos para comprar un carro usado en Colombia

Comprar un carro usado no se limita únicamente a llegar a un acuerdo con el vendedor; también implica cumplir con una serie de requisitos legales y administrativos. Entre los principales se encuentran:

• Formulario de traspaso de vehículos: expedido por la Secretaría de Movilidad del municipio correspondiente. Este documento incluye información detallada como placa, marca, clase de vehículo, línea, tipo de combustible, color, modelo, cilindraje, capacidad, blindaje, potencia, carrocería, número de motor, chasis, serie y VIN, tipo de servicio, además de los datos del propietario y del comprador.
• Paz y salvo de multas de tránsito: tanto el comprador como el vendedor deben estar al día en sus obligaciones.
• Inscripción en el RUNT (Registro Único Nacional de Tránsito).
• Contrato de compraventa, debidamente diligenciado.
  

Adicionalmente, es recomendable verificar los antecedentes y estado del vehículo mediante los siguientes documentos:

• Certificado de la DIJIN, que garantiza que el vehículo no tiene pendientes judiciales y que sus sistemas de identificación son originales.
• SOAT vigente.
• Revisión técnico-mecánica al día.
• Pago del impuesto vehicular actualizado.

Como dato curioso no necesitas tener licencia de conducir para comprar un auto usado en Colombia, aunque circular sin el pase es razón de multa.

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¿Dónde se debe realizar el trámite de traspaso de propiedad de un vehículo?

El traspaso de propiedad de un vehículo puede ser solicitado tanto por personas naturales como por personas jurídicas. Este trámite debe realizarse de manera presencial ante la Secretaría de Movilidad del municipio en el cual se encuentre matriculado el vehículo.

Es importante precisar que el traspaso únicamente puede adelantarse en el lugar de registro inicial. Por ejemplo, si el vehículo fue matriculado en Bogotá, aun cuando actualmente se encuentre en Cartagena, el trámite deberá realizarse en Bogotá.

Adicionalmente, la normativa contempla la figura del traspaso de cuenta, que permite inscribir el vehículo en un organismo de tránsito distinto al de su matrícula original y, posteriormente, efectuar el traspaso correspondiente.

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¿Cuánto cuesta el traspaso de un vehículo?

El valor del trámite de traspaso de propiedad de un vehículo no es fijo, pues varía según el modelo y la gama del automotor. Además del costo básico establecido por la autoridad de tránsito, el interesado deberá asumir el pago del Impuesto de Retención en la Fuente, equivalente al 1% del avalúo oficial del vehículo, de acuerdo con las tablas emitidas por el Ministerio de Transporte.

Tarifas de trámites en Bogotá 2025

Para el 2025 el valor del traspaso de propiedad es el siguiente:

• Automóvil $215.350 
• Motocicleta $121.950.

Licencia de conducción:

• Carro: $272.150
• Moto: $225.750

Matrícula de vehículo:

• Carro: $583.800
• Moto: $350.000

Pico y placa solidario: Aumentó un 5.2% respecto a 2024.

¿Quién debe asumir el costo del traspaso de un vehículo?

En el marco de una compraventa de vehículos usados, es común que surja la duda sobre quién debe pagar el costo del trámite de traspaso. Aunque la ley no establece una obligación específica, por costumbre mercantil reconocida por la Cámara de Comercio de Bogotá, lo habitual es que los gastos se dividan entre comprador y vendedor.

No obstante, el impuesto de Retención en la Fuente corresponde al vendedor, ya que este valor debe ser incluido en su declaración de renta.

Es importante tener en cuenta que el único autorizado para adelantar el trámite de traspaso es el propietario registrado del vehículo o, en su defecto, un tercero debidamente facultado mediante poder notarial.

¿Cuáles son los riesgos de dejar un traspaso abierto?

Lo que comúnmente se conoce como “traspaso abierto” constituye una práctica indebida que carece de efectos legales y que, además, puede generar serias consecuencias tanto para el comprador como para el vendedor.

• Para el vendedor: si el comprador no realiza el pago oportuno de impuestos, será el antiguo propietario quien deba asumir esa obligación. De igual forma, este responderá por multas, comparendos y cualquier incidente en el que se vea involucrado el vehículo mientras continúe registrado a su nombre.
• Para el comprador: si el vendedor enfrenta procesos ejecutivos por deudas u obligaciones con terceros, el automotor puede ser objeto de embargo y secuestro, incluso después de la compraventa.

Por estas razones, resulta indispensable realizar el traspaso formal de manera inmediata, garantizando seguridad jurídica y confianza en la operación de compraventa.

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¿Qué es la tarjeta de propiedad vehicular?

De acuerdo con el Código Nacional de Tránsito (Ley 769 de 2002), la tarjeta de propiedad —también llamada licencia de tránsito— es el documento que identifica de manera única las características del vehículo y a su propietario. En ella se consignan datos como:

• Modelo del vehículo
• Año de fabricación
• Número de chasis
• Número de placa
• Color
• Tipo de combustible
• Entre otros elementos técnicos y de identificación
  

La tarjeta de propiedad no solo acredita la titularidad del vehículo, sino que además es de porte obligatorio para circular en el territorio nacional.

Este documento también es exigido por las Secretarías de Movilidad en el trámite de traspaso. Por ello, el vendedor debe entregar la tarjeta de propiedad original, la cual debe estar registrada a su nombre y no al de propietarios anteriores.

De no realizarse el traspaso de manera adecuada, se incurre en la figura de traspaso abierto, lo que puede generar consecuencias negativas. En caso de incumplimiento en el pago de impuestos, será responsable quien figure como titular en la tarjeta de propiedad.

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